Cuéntanos sobre ti
Mi formación es tanto legal como económica. Soy licenciado en Derecho por la Universidad de Barcelona, Máster Oficial en Gestión Económica por la Universidad Abat Oliba CEU y Postgrado CECRI en Reestructuración Societaria y Financiera e Insolvencias por la Universidad Pompeu Fabra (iDec).
Siempre he ejercido como abogado en restructuraciones e insolvencias en toda la geografía española y para proyectos tanto nacionales como transfronterizos. Ejerzo también como Administrador Concursal y Mediador en los ámbitos Civil, Mercantil y Concursal, acreditado por la Asociación Europea de Arbitraje (AEADE) y el Consejo General de Economistas (CGE).
Durante varios años he sido Profesor Asociado de Derecho Internacional Privado en la Universidad de Barcelona y Vocal de la Sección de Derecho Concursal del Ilustre Colegio de Abogados de Barcelona. En la firma ostento el cargo de Socio Director del área de Restructuraciones e Insolvencias.
¿Cómo crees que estos últimos años han influido en la forma de trabajar?
Es evidente que el 2020 marcó un antes y un después en la forma de trabajar a nivel mundial. En pocos años se ha conseguido lo que en una situación normal hubiese costado, quizás, más de una década. Creo que hay que saber aprovechar los cambios e identificar los que realmente aportan de los que no. Todo va muy deprisa y no es fácil. Está claro que la digitalización y la inteligencia artificial han permitido y seguirán permitiendo en el futuro agilizar procesos, gestionar de manera eficiente los tiempos y ser más competitivos.
¿Qué es lo que más valoras de tu día a día? ¿Y de formar parte de Baker Tilly?
Lo que más valoro de mi día a día es poder construir con otros equipos soluciones específicas para resolver situaciones de crisis empresariales. Y poder hacerlo en un entorno como Baker Tilly es muy gratificante. Somos una firma joven y con unos perfiles muy diversos pero profesionales.